¿ Quién no se ha preguntado alguna vez por qué juegan los/as niños/as ?.
El juego es algo primordial : aprendemos jugando.
El origen de los juegos esta relacionado con nuestros antepasados: actividades agrícolas, rituales religiosos , entrenamiento de los guerreros en tiempos de paz.
Tuvimos mucha suerte nosotros/as pues nuestros abuelos y padres nos enseñaron a jugar y, gracias a ellos, disfrutamos de una feliz niñez.
Las preguntas son estas :
¿ Están matando el juego las consolas, ordenadores, etc ? ¿ Son tan felices los niños ahora como lo eramos nosotros no hace tantos años?.
La realidad actual nos demuestra que los/as niños/as de hoy no juegan como jugabamos antes. Las nuevas formas de ocupar el tiempo libre son ahora otras : ordenadores, televisión, videojuegos, etc. Muchos de aquellos juegos se están olvidando porque en las ciudades ya no se practican.
No perdamos la esencia, pues los juegos populares han sido y son representativos de un pueblo, una comarca o un país.
Estos se han convertido en tradicionales cuando se han trasmitido de padres a hijos a través del tiempo. Apostemos por ellos y trasmitamos a nuestros/as alumnos/as, a nuestros hijos/as todos los juegos de entonces.
Las ventajas son muchas:
Durante el juego, se opera un relajamiento de las tensiones, de los conflictos de la existencia real. El juego se convierte en una valiosa actividad a nivel psicológico ya que es un momento de recuperación, un momento de libertad con respecto a las tensiones.
Además presenta una características muy destacadas :
En todo juego hay un reconocimiento de sí mismo y una exploración del mundo circundante.
Todo/a niño/a se ejercita y se prepara para ser mejor . Cada uno/a juega sus posibilidades en relación a una realidad donde él/ella define las reglas de juego.
El juego ofrece la oportunidad de entrar en relación real o imaginaria con el otro bajo diversas formas.
El juego significa enfrentamiento y colaboración, antagonismo y cooperación. Gracias a la presencia del otro, del adversario, se produce la socialización en el juego.
En tal situación, el/la compañero/a se vuelve una parte de mí mismo, y es así como aprendemos a ponernos en el lugar del otro, con lo que podemos vislumbrar al mismo tiempo e propio yo y el otro.
El juego parece responder a condiciones educativas más profundamente que las actividades reguladas y dirigidas por la sociedad global. Cuantas más reglamentaciones, menos posibilidades para el/la niño/a de elaborar sus propias reglas.
Existen muchos tipos de juegos : de salto, de equilibrios, de fuerza, de lucha. de habilidad , de lanzamientos…
Muchos de ellos los trabajamos en el área de Educación Físiva. Algunos de ellos son : Juegos de comba ( botella de vino, aceite,vinagre y sal , chorizo ), el pati, gallina ciega, el jinque, Sogatira, el gua, las canicas, la calva, la petanca, los bolos, el cortahilos, etc
El reportaje de La Gaceta de Salamanca del 20 de noviembre” ¿ A que jugaban los abuelos?”
nos abre los ojos y nos esta trasmitiendo que debemos hacer algo desde todos los ámbitos para que las generaciones que vienen y que están sigan apostando por los juegos populares y tradicionales.
Desde las clases que imparto en este centro apuesto por ello y quiero poner de manifiesto que, desde que participo en la estupenda labor de educar, el juego me ha permitido buscar el desarrollo integral del/a alumno/a como así recoge nuestro cuuriculo pues mejora la forma de enseñar: motivación, participación voluntaria, aceptación de normas. adquisición de un rol... Apuesto por el juego como medio y como contenido. Apostemos todos .
Jugar sirve para vivir en equilibrio, aprender y constituirse en un niño/a activo/a, capaz de crear.
Siempre que tengo ocasion de jugar a algunos de estos juegos me lo he pasado muy bien y es una pena que lo tengamos semiolvidados.
ResponderEliminarMi padre me ha contado que estaban siempre en la calle y apenas tenian dinero para juguetes por lo que tenian que jugar a estos juegos.
Rubén Bastida 6º
Me gusta mucho este blog ya que podemos comentar lo que nos parezca
ResponderEliminarIván Velasco García 6º